Es raro describir la sensación que me inunda el pecho ahora. Ahora, después de casi una hora desde que me dejaste en la puerta, aún siento esas mariposas en el estómago y tus besos por todo mi cuello. Y parece que tus dedos siguen enlazados con los míos. Te echo de menos. Como si me faltase algo. Y realmente es que me faltas tú. Tengo ganas de apretarte, de volver a besarte. Quiero volver a estar sobre tu cama y acariciar tu pelo. Quiero trazar un camino sinuoso por tu espalda y derretirme en el momento que muerdes mi cuello. Tengo miles de "Te quiero" trabados en la garganta, y no me dejan respirar. Sólo te quiero apretar fuerte. Quiero que notes todo mi amor y toda mi entrega en esos abrazos. Que notes que ya no puedo vivir sin tí. Que te amo a morir... Que me encanta compartirlo todo contigo. Desde tus besos, hasta las tardes tranquilas en la Kame, hasta un simple helado de yogur con pecado de Eva, nueces caramelizadas y nubecitas de colores. Me encanta todo. Besarte después de que me gastes una broma. Sonreírte tiernamente cuando caminamos. Contarte mis secretos, mis problemas, mis dudas. Apretarte contra mi pecho y susurrarte que te quiero más que a nada. Y en el momento en el que me dices "Te amo", con todas las letras y todo el sentimiento, me siento simplemente completa, y me convierto en la encarnación de la alegría y el orgullo. Porque tengo al mejor novio del mundo entero. Porque eres lo mejor de mi mundo. Y te amo. Te amo a morir. Aunque sólo sean dos meses. No importa. El tiempo contigo es simplemente indescriptible...
P.D: Aún tengo tus ojos tricolores taladrandome como sólo tú sabes hacerlo. Gris tormenta, verde menta y marrón chocolate <3